



Nosotros
“SOMOS EL REFLEJO DEL ESPÍRITU"

LAURA FERRO
Harta de engaños y de confusión... Fatigada de no hallarme parte del mundo… Entregada, durante más de dos décadas, a la búsqueda incesante del camino que me pudiera reintegrar y devolver a mí Misma, he alcanzado a experimentar, a través de mi proceso de búsqueda, que el camino de Regreso al Origen es, en realidad, un camino de pérdida que te va vaciando, despojando y alejando de todo lo que creías ser, pero no Eras.
En mi kairos, sincronísticamente, llegué a la obra de Moyano, la que me condujo a la comprensión de la raíz del Gran Engaño y que me llevó a conectar con la Verdad que llevaba toda la vida buscando: la Verdad de lo que Yo era, de lo que Soy, de lo que siempre había Sido sin recordarlo. Una Verdad que me colmó de Voluntad y de Valor para entregarme a esta tarea de difundir la Sabiduría Hiperbórea y, por Lealtad al espíritu cautivo, acercarla a aquellos que, sin saberlo, están sirviendo al enemigo y buscando la verdad donde sólo hay espejismos.
Así, llegados a este Ahora, siento que todo ha servido y, sin embargo, que nada vale ya, que todo sobra. Sí, me formé, viajé, soñé, amé... Creí ser filóloga, profesora, escritora, terapeuta... Y mientras los restos de olvido juegan al escondite con mi historia, recobro la entereza, el aullido, el frío, el graznido, el grito, la muralla, la dignidad, el rugido, la Grandeza. Y lo incorporo todo al ritmo del Silencio, al implacable eco del Recuerdo, al contorno del cauce que acelera mi marcha sin retorno hacia el Regreso.

QUINTO
Quien busca ampliar su conciencia no está buscando en el lugar correcto, que es la consciencia del alma. Quien en verdad busca ampliar su conciencia busca salirse de ella para ver los opuestos y el tiempo confluyendo a un final determinado desde el principio. La verdadera conciencia espiritual está más allá del tiempo, está más allá del espacio, está en el arroyo líquido de su herencia Divina y su sangre Pura.
Siempre me pregunté si existía la posibilidad de un mundo sin dualidad, sin diferencias marcadas por la polarización política, ideológica o religiosa. Entonces me di cuenta de que si yo contemplaba esa idea era por la reminiscencia espiritual de que existía un destino infinito, un Cielo indeterminado, un mundo no de diseño y con final triste para todos, sino un mundo donde el Hombre se guía por la voluntad resuelta de su Espíritu. Ese ideal no es de este mundo y esa capacidad de tender puentes entre los opuestos es una cualidad de nuestro Pueblo.
Por eso, desde la más vil de la prisiones -la prisión cultural de la degradación- lanzamos un llamado de auxilio a nuestros guías espirituales para que acudan con sus voces de fuego y nos orienten hacia la luz increada que ilumina el Origen: esa tenue pero real luminiscencia que brota en todo aquel que no concibe este mundo como su verdadero hogar. La verdadera consciencia espiritual está en Volver a unir a nuestro Pueblo en torno a sus orígenes más allá de las estrellas, más allá de la materia, más allá del primer hombre Semidivino, más allá del propio Origen. Y una consciencia de ese tamaño abarca la propia obra del creador.
Esta es mi presentación, que más que presentar qué SOY, es un llamado para destruir desde dentro la prisión cultural y su universo de mentiras.

ÉLELLA ELLAÉL
Desde que se dio el Kairos de nuestra coincidencia, hace tres años, Quinto y yo hemos ido intercambiando palabras, poemas, discernires, recuerdos… que nos han servido a ambos como espejo y como impulso para ir reunificando dentro las miríadas dispersas de nuestro Yo, confundido y enturbiado por los lodos de este mundo infame.
Enseguida vimos que nuestro caminar, entrelazado en una Danza que nos trascendía, portaba la fuerza evocadora necesaria para acometer una estrategia conjunta que nos llevó a lanzar el zoom de estudio de la obra de Moyano -“El Reflejo del Espíritu”-; que nos llevó a escribir juntos el libro de El Regreso: viaje sin retorno hacia el Origen; y estrategia que hoy nos ha conducido a lanzar al mundo la Universidad Atlante.
Con cada uno de nuestros actos conjuntos te entregamos un atisbo de nuestro infinito que ayude a tu Sangre a escuchar el eco de la Canción del Regreso y te la cantes, y te recuerdes, y regreses purificado y absoluto, heroico y victorioso, a los Mundos Increados a los que perteneces.
